Venta online de cursos y talleres
¿Te preguntas a menudo por qué nadie se interesa por tus interesantes talleres sobre (lo que sea)? ¿No sabes cómo vender online tus cursos y talleres? ¿Te has gastado un dineral en Google Ads para promocionarlos sin obtener resultados?
Si estás asintiendo con la cabeza te lo voy a aclarar usando el método «quita-tirita» (de golpe, para que no sientas el dolor): hay algo estás haciendo mal.
La estás fastidiando en algún punto.
En internet hay millones de personas ávidas por comprar online tus cursos y talleres. Sí, aunque vendieras un curso o taller sobre cómo sobrevivir a una apocalipsis zombie, te aseguro que tendrías cantidad de personas dispuestas a comprarlo; de todo hay en la Viña del Señor.
Entonces ¿cuál es el problema? No eres tú, ni tus talleres, ni tus cursos, sino la manera en que los presentas y tus prisas por vender.
Desde que me muevo por internet, y llevo ya unos cuantos años, he visto de todo:
- PDFs cutres con el título del curso y el precio; algunos en lugar de precio lo llaman aportación (no voluntaria, por supuesto).
- Mails a puerta fría en los que básicamente te piden que te apuntes al curso o taller X el cual cambiará tu vida; hacen spam y encima ni se molestan en trabajar el mensaje.
- Páginas web en las que te encuentras poco más que el nombre con el que han bautizado la formación que pretenden vender, las fechas en las que se imparte y un botón para realizar el pago.
- Ah, y la versión que más me gusta: anuncios de Google Ads o Facebook promocionando el taller o curso y que, al clicar en ellos, te llevan a una página de aterrizaje (por llamarla de alguna manera) que en el mejor de los casos es página de inicio de la web donde el curso o taller anunciado brilla por su ausencia.
Con tal sagacidad empresarial y virtudes marketinianas (sin ánimo de ofender) es fácil entender por qué algunos profesionales fracasan estrepitosamente.
Por mi experiencia, he clasificado a los profesionales empeñados en vender online cursos y talleres en 5 categorías:
- Los cutres: profesionales que creen que con cualquier panfleto, página o email venderán sus cursos y talleres; aunque los anuncios parezcan diseñados por niños de parvulario (horteras).
- Los vagos: profesionales que ofrecen información telegráfica y esperan que los posibles clientes contacten con ellos si desean saber más acerca del curso o si tienen dudas.
- La combinación de cutres y vagos: puedes hacerte una idea de los churros que salen de estas mentes empresariales. Si para vender ponen toda la carne en el asador, ni te cuento lo maravillosos que deben ser sus cursos y talleres (nótese la fina ironía). Vamos, que te apuntas a su curso de «Cómo sobrevivir a un apocalipsis zombie» y ya puedes darte por «comido».
- Los que no tienen ni idea de vender aunque ponen voluntad: estos profesionales me despiertan ternura y agresividad al mismo tiempo. Por un lado pienso «pobre, se nota que lo intenta, pero no sabe más (todavía)». Y por otro lado me entran unas ganas irrefrenables de agarrarle por la pechera, darle cuatro meneos y gritarle: «Despierta de una vez o venderás menos que un nazi en una sinagoga».
- Los cracks: profesionales que se lo curran de verdad, aprecian el valor del marketing y usan el copywriting sin saltarse una coma. Son los «putos amos» de las ventas online de cursos y talleres.
¿Y tú? ¿Qué tipo de profesional eres?
Si te identificas con alguna de las 3 primeras categorías: lo siento. No hay esperanza para ti. Quizás en otra vida.
Si estás en la categoría 4: aleluya. Las nubes del cielo se han abierto y un rayo de luz Divina te está iluminando (aunque no lo veas).
Si estás en la categoría número 5: enhorabuena. No sé qué haces leyendo este artículo. Bueno, sí. Mi forma de escribir es tan súper mega seductora que no puedes despegar tus ojos de la pantalla. Ainx, voy a ponerme roja. Gracias.
Descubre cómo vender online (como churros) tus cursos y talleres
Primero debes saber la diferencia entre «poner a la venta cursos y talleres» y «vender cursos y talleres».
- Poner a la venta es lo que hace la mayoría.
- Vender es lo que hace la minoría.
Segundo, debes entender que nadie comprará tus cursos y talleres solo porque los anuncies en tu web, en Facebook, Google, Twitter o en cualquier otro sitio que se te ocurra.
No importa si tus cursos tienen una calidad abrumadora.
Vender más o vender menos es casi siempre una cuestión de branding y marketing más que de calidad*.
*Nota: Si tus cursos y talleres no tienen una mínima calidad las malas recomendaciones no tardarán en llegarte. Engañar a tu cliente potencial es «pan para hoy y hambre para mañana».
Antes de vender online cursos y talleres
Antes de pasar a la acción determina a quién vendes tus cursos y talleres, qué tipo de cliente se siente atraído por tu propuesta.
El peor error que puedes cometer es creer que como cualquier persona puede sacar provecho de tus cursos y talleres, cualquier persona estará interesada en comprarlos.
Vender a todo el mundo es la fórmula perfecta para no vender a nadie
Detente y piensa: ¿Quién es la persona a la que mi curso o taller le irá como anillo al dedo?
¿Es hombre o mujer?
¿Tiene estudios básicos o universitarios?
¿Necesita el curso para mejorar su vida personal o laboral?
¿Qué problema tiene esa persona que tu curso o taller puede resolverle?
Etc…
Comprueba si hay demanda del curso o taller que deseas vender online
Te dedicas a (pon aquí a lo que te dedicas) y crees que (tu curso o taller) despertará el interés de la mitad de los habitantes del globo terráqueo.
Cagada.
Lanzas el curso al mercado y en lugar de oír el loor de las multitudes lo único que oyes es el cantar de los grillos.
Ni un alma interesada en tu fabuloso curso o taller.
¿Qué ha ocurrido?
La próxima vez que quieras vender un curso o un taller no pienses de forma egocéntrica, hazlo de forma estratégica.
Descubre si hay demanda y, cuando estés seguro de que la hay, lánzate a ofrecer tu curso o taller.
Nunca antes.
Ojo, no hablo de cantidad de personas interesadas en tu curso o taller, sino de la necesidad e interés de un grupo concreto, el cual puede ser extenso o no.
Imagina que ofreces un curso de supervivencia para apocalipsis zombie.
Sí, hay mucho friki suelto y no podemos descartar la posibilidad (por remota que sea) de que haya un apocalipsis zombie en un futuro.
Pero… ¿crees que esos frikis, en estos momentos, tienen una necesidad real que les impulsa a comprar un curso o taller de técnicas de defensa y supervivencia ante muertos vivientes?
No habías caído en eso, ¿verdad?.
Has invertido tiempo, dinero y esfuerzo en crear un curso completo y detallado sobre algo que no tiene demanda.
Tienes 2 opciones:
a) Guardar el curso o taller en un cajón a la espera de que llegue la dichosa apocalipsis zombie; si llega te vas a forrar.
b) Sacar el curso o taller al mercado e invertir más dinero, más tiempo y más esfuerzo en averiguar dónde están esos frikis y cruzar los dedos para que sientan la necesidad imperiosa de protegerse de los muertos vivientes y compren.
En serio, ¿quieres hincharte a vender online cursos y talleres?
Ahora imagina que por esas casualidades de la vida mis predicciones son erróneas.
Existe un virus que ataca a la población y una extraña epidemia se extiende como la pólvora. Hay cadáveres por todas partes en busca de carne fresca y todos aquellos que no se han convertido en zombies están en peligro.
Genial.
Es hora de desempolvar tu curso o taller sobre cómo sobrevivir a un apocalipsis zombie; seguro que estará súper solicitado.
Pero… ¡Oh sorpresa!
Hay un montón de avispados que viendo la oportunidad de negocio han sacado al mercado cursos y talleres muy parecidos al tuyo.
Te da el bajón.
Tu curso o taller sobre zombies, anteriormente tan original (aunque sin posibilidades comerciales, todo sea dicho de paso) se ha convertido en una gota perdida en un océano de cursos y talleres de supervivencia.
Resultado: a pesar de existir una demanda enorme de este tipo de cursos de supervivencia te las ves y te las deseas para vender el tuyo y ganas una miseria.
Qué rabia. ¿Qué puedes hacer para vender más?
Ante la avalancha de competencia la opción más sensata es dejar de vender lo mismo que los demás.
Diferénciate.
Crea un curso o taller muy especializado, único y original.
Si deseas vender necesitas destacar de entre todos los demás.
Por ejemplo: «Cómo ir al baño durante un apocalipsis zombie y no morir en el intento»
Es muy específico y ante una apocalipsis zombie, muy útil. Me juego el cuello a que tiene el éxito asegurado porque:
a) todo el mundo necesita ir al baño en un momento u otro del día.
b) estar sentado en la taza del WC es una situación de máxima indefensión; no sé si has visto alguna película de zombies (yo pocas y todas son igual) pero en el baño es donde más personajes estiran la pata.
Y si además de especializar tus cursos y talleres haces que sean novedoso: lo petas.
¿Novedoso?
Sí, una lección o actividad que nunca se haya ofrecido y que tu cliente potencial la perciba como algo de valor.
Una idea: en el curso de «cómo sobrevivir a una apocalipsis zombie» podrías incluir prácticas de tiro en el cementerio del pueblo.
Es cuestión de ponerle imaginación e igenio.
Fácil, ¿no?
Imprescindible que tengas una página de ventas para tus cursos y talleres
Pocas páginas de venta he visto en webs que no sean de marketing o infoproductos. Y como he dicho antes, y lo repito, ofrecer un curso no es sinónimo de vender un curso.
Para vender necesitas:
- Comunicar
- Generar confianza
- Convencer.
¿Pero qué pasa? Que somos naífs y pretendemos vender sin comunicar, sin generar confianza y sin convencer a nuestros clientes potenciales.
Más o menos, así:
Curso de supervivencia para apocalipsis zombie.
- Correr como una gacela para librarte de los zombies.
- Encontrar los mejores escondrijos por si quedas atrapado y rodeado de zombies.
- Disparar con puntería para matar zombies sin desperdiciar munición.
- Auto inyectarte el antídoto en caso de mordedura de zombie (antídoto y jeringas no incluídos).
Precio 500€
¡No esperes más, el apocalipsis zombie está a la vuelta de la esquina!
Ala, y te quedas tan ancho. Sin una página de ventas, esperando que compren tu curso porque sí, porque tú dices que lo hagan.
¿Todavía te extraña que nadie compre?
Qué debe contener tu página de ventas
Esta estructura sirve para cualquier tipo de curso o taller.
1. Enunciado (de qué va el curso y qué conseguirá tu cliente potencial si lo compra) No escribas únicamente el título del curso. Sé específico.
Por ejemplo, en lugar de escribir «Cómo ir al baño durante un apocalipsis zombie y no morir en el intento» pon «Curso para aprender a disparar y sobrevivir a los zombies mientras estás indefenso sentado en la taza del WC»
2. Cita los puntos de dolor de tu cliente potencial. Menciona los problemas que puede querer solucionar con tu curso o taller.
Por ejemplo: «Vives en estrés continuo. Cada vez que vas al baño temes sufrir un ataque zombie y no sabes cómo protegerte».
- Punto de dolor = estrés causado por el temor a morir a bocados cada vez que va al baño.
- Solución = tu curso o taller le enseña a defenderse en caso de ataque zombie en el baño.
3. Preséntate como el guía. En mi post «Storytelling: qué pasa cuando lo aplicas en la página sobre mí» ya te expliqué que jamás debes presentarte como el salvador de tu cliente potencial, sino como su ayudante.
Trasladado al ejemplo que nos ocupa, y para que quede claro, tú misión es vender el curso «Cómo ir al baño durante un apocalipsis zombie y no morir en el intento» como una herramienta de empoderamiento.
Tú no salvas a tu cliente potencial con el curso. Es él quien se auto protege gracias al curso; y tu le guías para que lo consiga.
4. Enumera qué beneficios aporta tu curso o taller a tu cliente y los resultados que conseguirá si lo compra. A través del copy enumera los beneficios y explica transformación que sufrirá tu cliente (el antes y el después) al comprar tu curso o taller; no te servirá de nada citar solo el temario.
- Beneficios: si con tu curso «aprenderá a correr como una gacela para escapar de los zombies» di que «sus probabilidades de supervivencia aumentará un 50%».
- Transformación: si su vida corre peligro cada vez que los zombies le persiguen porque es lento (el antes) cuéntale que aprenderá a correr tan deprisa que se deshará de los zombies en un abrir y cerrar de ojos y aún le quedará energía para ir a buscar provisiones a algún supermercado abandonado y desvalijado (el después).
5. Los testimonios son importantes para apoyar lo que dices. No imprescindibles, pero sí muy aconsejables y recomendables. La prueba social da veracidad a tus proclamas; son el TripAdvisor para tus cursos y talleres. Si usas testimonios asegúrate de que cuenten qué transformación han sufrido gracias a tu curso o taller. Testimonios diciendo «Un curso muy interesante. Me lo pasé muy bien matando zombies» no aportan nada ni ayudan a la venta.
6. Detalla en qué consiste tu curso/taller y qué contiene. No anuncies que enseñas a correr, a esconderse, a disparar y a inyectar el antídoto. Explica qué objetivo tiene el curso y el contenido que hará que lo alcance. Da detalles, todos los que puedas: en qué soporte se llevan a cabo las clases, qué material se necesita, si se realizan prácticas o ejercicios, si hay colaboradores que imparten lecciones concretas, etc. En definitiva, que tu cliente sepa de antemano con qué se encontrará. Eso le dará confianza y seguridad para sacar la billetera y pasar por caja. Lo que me lleva al siguiente punto.
7. Precio y garantía: Si has bordado los puntos del uno al seis tendrás a tu cliente potencial preguntándose «¿Y todo esto por cuánto me sale?». Llega el momento de indicar el precio y, siempre que se pueda, mostrar la garantía.
Las garantías están enfocadas a dar seguridad y confianza al cliente potencial, pero no existe ninguna universal, que sirva en todos los casos y circunstancias. Aún así, con los cursos y talleres hay dos que funcionan muy bien:
a) Dar la primera lección online o clase presencial gratis. El cliente puede ver si le gusta tu estilo como profesor o si el contenido es demasiado básico o complicado para él.
b) Ofrecer la devolución del importe del curso si al cabo de X días el cliente se da cuenta que no es el curso o taller que esperaba (por el motivo que sea).
Con la garantía reduces el riesgo para el cliente, le quitas presión y le animas a comprar con tranquilidad.
Por ejemplo, en el curso de «Cómo sobrevivir a una apocalipsis zombie» una buena garantía sería ofrecer la devolución del importe del curso junto con una dosis de antídoto gratis en caso de ser mordido por un muerto viviente durante las prácticas.
Hazme caso, con una garantía convincente la única frase que saldrá de tus labios será «me los quitan de las manos (los cursos o talleres)»
8. Responde a las preguntas frecuentes antes de que las formulen: Tu cliente está decidido a comprar. Bueno… casi decidido. Por más consistente que sea tu tu página de ventas, si al llegar al final todavía tiene dudas, no comprará.
Quizás alguno de esos clientes potenciales indecisos te escriba para aclarar sus dudas, pero debes tener en cuenta que eso pasa con poca frecuencia y que solo se da en casos en los que el cliente está realmente interesado en el curso o taller; lo más habitual es que no hagan ese esfuerzo y adiós venta.
¿Qué opción tienes para evitar que se te escapen clientes potenciales que ya casi tenías en el bote? Finalizar la página de ventas respondiendo las preguntas frecuentes, esas dudas que sepas o intuyas que se plantean antes de comprar tu curso o taller. No esperes a que sean los clientes los que te las formulen. Adelántate y vende.
Por ejemplo, ¿En caso de convertirme por accidente en zombie durante las prácticas del curso, mi familia recibirá una indemnización?
9. Llamada a la acción (CTA): No te olvides de este paso imprescindible para cerrar la venta. Pide al cliente que compre. Pon una llamada a la acción (CTA) en la sección de «Precio y garantía» y otra después de las «Preguntas Frecuentes».
3 trucos para tener más conversión en tu página de ventas para cursos y talleres
En marketing, y por extensión en copywriting, existen fórmulas para aumentar el interés de los clientes en los productos y servicios y en consecuencia aumentar la conversión.
Usa alguna de estas 3 en tu página de ventas para cursos y talleres cada vez que realices una llamada a la acción.
1. Principio de escasez y urgencia: Este principio de marketing se usa para que la persona interesada en tu curso o taller entienda que no es un recurso ilimitado y que si no se da prisa, se quedará sin él. El objetivo es que el cliente potencial tome acción rápida para no quedarse sin su plaza.
Por ejemplo: «Compra el curso. Las plazas son limitadas» o «Inscríbete al taller. En un par de meses dejaré de ofrecerlo».
2. Descuentos: el descuento es el recurso más utilizado y unido al principio de urgencia consigue maravillas.
Ejemplo:
«50% de descuento en el curso “Aprende a cargarte zombies de dos en dos”. Oferta solo hasta mañana» o «Oferta del taller “no seas lerda y evita que que un zombie te muerda”. A mitad de precio solo para las 3 primeras personas en apuntarse».
3. Bonus: los bonus es otra forma de oferta que puedes usar junto al principio de urgencia. Con él das más por el mismo precio.
Ejemplo:
Si te apuntas ahora al curso «Cómo sobrevivir a una apocalipsis zombie» además de las lecciones de supervivencia conseguirás un fabuloso bonus de mindfulness, para mantener la mente enfocada y calmada cuando los muertos vivientes te persigan.
Cursos y talleres «Bestseller»
Una página de venta no es un remedio mágico, pero sí una parte de la ecuación que te ayudará a vender tus cursos y talleres.
Con la página de venta captarás la atención de tu cliente potencial, generarás interés y crearás un lazo de confianza.
La segunda parte de la ecuación son las visitas. Una página de ventas no funciona como un imán; y aunque lo hiciera tus clientes no están hechos de metal.
Necesitas un plan para dar visibilidad a la página en la que vendes tu curso o taller.
Si estás pensando «Caramba, Olga, con visitas cualquiera vende». Estás muy equivocado.
Las visitas sin la página no son nada y la página sin visitas tampoco.
Míralo de la siguiente manera.
Tus cursos y talleres pueden ser como un billete en medio de la calle o una caca de perro sobre la acera.
Por poca gente que pase por la calle (tu página de ventas) ¿cuál de las dos opciones crees que terminará en manos de alguien?
Tú decides cómo quieres vender.
Comunica, seduce y copywriting.
PD: descubre más secretos para vender cursos con mis recursos gratuitos de copywriting
4 comentarios en «Descubre las claves para vender online tus cursos y talleres con éxito»
Madre mía, muy ilustrativo, zombie apocalíptico incluido ?♀️
Santa razón tienes, Olga! Me lo guardaré como guía a ver si adecento mis landings de una vez ?
Ya me dirás si te notas en los resultados; con o sin zombies ??
Que genialidad esta página!! Muchisimas gracias??? me ha sumado un montón, ya he apuntado todos lo que nos has enseñado. Hoy mismo lo pongo a la práctica!. Saludos desde Argentina.
¡Estupendo! Me alegro que te haya servido mi blog para mejorar el copy. Saludos, Mirna 🙂