Qué es el copywriting:
Con este artículo doy el segundo pistoletazo de salida a mi blog; el primero fue hablando sobre qué es un copywriter.
Artículos que hablen sobre copywriting hay a patadas, por eso a este quiero darle un enfoque más práctico, y creo que útil, con el objetivo de saciar la curiosidad de los que aún no sois duchos en la materia o desconocéis el fascinante mundo de los textos persuasivos .
No te soltaré la Biblia en verso, para eso ya tienes el oráculo del S. XXI, llamado también Wikipedia .
El oráculo dice que: el copywriting es el acto de escribir textos con propósitos publicitarios (versión reducida).
Dicho así suena muy feo. Y aburrido. Así que para poner salsa al asunto, voy a contarte mi historia: cómo empecé a ganar dinero con mi primer negocio online (que no tenía nada que ver con escribir) gracias al copywriting.
Cómo empecé a ganar dinero con el poder del copywriting:
Mi relación con el copywriting es profesional. Uso el poder de las palabras para ayudar a negocios que contratan mis servicios de copywriting.
Aunque como estoy gran parte del día pegada al ordenador, leyendo, mi relación con el copywriting también es personal; experimento los efectos que tienen los textos de otros en mi cerebro.
Inciso. Entre tú y yo: según lo que leo mi cabeza estalla. Madre mía del amor hermoso la de trabajo de copy que aún queda por hacer. Cierro el inciso.
A lo que iba, mi primer contacto con el copywriting se remonta al año 2005.
Fue cuando decidí dejar mi trabajo fijo para emprender una aventura empresarial: monté la primera tienda online de papel pintado de España, junto a mi esposo.
Debo decir que casi todos nuestros amigos y conocidos se echaron las manos a la cabeza. ¿Vender papel pintado? ¿Por internet? ¿Os habéis vuelto locos?
También había los que estaban en el otro extremo de la balanza y nos aplaudían. La frase que más oí durante mi etapa como emprendedora digital fue: vender por internet es el futuro.
Nunca entendí de qué futuro hablaban. Para mí era el presente. Es lo que tiene ser visionario y atrevido. Te apetece probar cosas nuevas y acabas liándote la manta a la cabeza.
En aquel entonces no había ningún ecommerce de venta de papel pintado en España y además yo era inexperta en ventas y en internet. Como es lógico, me asaltaron las dudas.
Arriba, una imagen de mi tienda online de papel pintado.
Vender rollos de papel pintado a 20 euros no me parecía ninguna proeza pero… ¿qué pasaba con los productos más caros? ¿Era factible venderlos online, sin hablar directamente con el cliente? ¿Con pagos por adelantado?
La cosa estaba difícil.
Pero yo estaba determinada a vender.
Tenía que conseguir que mis clientes compraran mis murales: cinco metros cuadrados de papel para pegar a la pared que costaban la friolera de entre 300 y 600 euros.
De repente me iluminé y pensé: si no puedo hablar con mis clientes para persuadirles de que compren los murales (y se gasten una pasta), lo harán mis textos.
Me puse manos a la obra.
La descripción de la ficha de producto debía enamorar. Mi intuición me decía que acompañar las fotos de esos carísimos murales con textos que susurraran «compra, compra…» a la mente del lector era la clave.
Bingo.
Los murales empezaron a venderse como rosquillas.
Acababa de descubrir la fuerza del copywriting en un negocio online. Sin querer.
Vale, Olga, no te emociones. Los murales quizás se vendieron como churros porque eran bonitos, o porque no había nadie más que los vendiera online, dirás.
No te lo discutiré. En esa época yo no tenía ni idea de copywriting y no se me ocurrió hacer ningún test para medir el impacto de los textos en las ventas.
Lo que sí que sé es que otras tiendas de venta de papel pintado online (mi competencia) acabaron copiando palabra por palabra las descripciones que yo había hecho para vender mis murales.
Recuerdo que en ese momento me sentó fatal. Sin embargo, ahora que me dedico a escribir para otros, me siento orgullosa de que se aprovecharan de mi trabajo (las descripciones no salen por arte de magia); al fin y al cabo cuando te copian es porque lo haces bien, ¿no?
Tú también puedes usar el poder del copywriting y ganar más dinero:
Si escribir no es tu don, no desesperes. Ni copies.
El copywriting requiere de una gran dosis de técnica (personalmente considero que también de creatividad), pero con empeño y dedicación puedes llegar a escribir textos persuasivos.
En un negocio el copywriting debe estar ominipresente en: vallas publicitarias, folletos, catálogos, anuncios en revistas y periódicos, cartas de ventas, guiones de los anuncios de televisión o radio, eslóganes, publicaciones en redes sociales, correos electrónicos…
No confundas el copywriting o redacción persuasiva con la redacción de contenidos. Son disciplinas diferentes, con objetivos estrechamente relacionados pero no idénticos y las habilidades que se requieren son distintas.
Redacción persuasiva o copywriting: Consiste en la elaboración de textos persuasivos.
Objetivo: conseguir que el lector realice una acción concreta; la más perseguida es que compre productos/servicios.
>>No son necesarias grandes dotes de redacción si la técnica que se usa es depurada.
Redacción de contenido o copywriting de contenidos: Consiste en la elaboración de textos informativos o de contenido; principalmente post.
Objetivo: dar visibilidad y reputación a la marca.
>>Requiere habilidad en redacción.
Grosso modo estas serían las diferencias. Aunque si lees la Wikipedia verás que mezcla ambas disciplinas y proclama que los copywriters de contenido son conocidos como copywriters si su trabajo aparece básicamente en internet.
Como dirían los ingleses: bullshit. Nunca te fíes de los oráculos.
El copywriting va un paso más allá de comunicar. El objetivo es establecer conexión emocional con el lector para que realice una acción. Cosa que no ocurre con la redacción de contenidos.
¿El copywriting se usa para engañar?
A través del copywriting consigues que el mensaje llegue al cerebro reptiliano (inconsciente) del lector saltándose el sistema límbico (consciente), el cual actúa creyendo que lo hace desde la razón, sin darse cuenta de que le mueve la emoción que el texto le ha despertado.
Aclaración: el copywriting es una arma de persuasión muy poderosa, pero no puede obligar a nadie a hacer algo en contra de su voluntad.
Imagina que estás planteándote comprar una experiencia que has visto que en mi página web. Consiste en tirarse por la ventana de un quinto piso. El ejemplo puede parecerte absurdo, pero cosas más raras he visto yo por estos mundos de Dios.
Tú, el comprador, tienes dudas. Te apetece sentir la adrenalina recorriendo tu cuerpo pero sabes que hay riesgos.
Yo, el vendedor, sé que tengo que convencerte para que compres mi experiencia. Vivo de eso.
Ahora imagina que tu «yo» vive en 3 mundos paralelos y que en cada uno de ellos lee un texto distinto en mi web.
- En el mundo paralelo 1: Mi texto explica las características del servicio. Cómo funciona la experiencia. Te informa de que se toman todas las medidas de seguridad necesarias para que el salto sea seguro; en el suelo hay un colchón para amortiguar la caída. Las explicaciones resuelven tus dudas pero no te animan a comprar. ¿Y si algo sale mal? ¿Realmente deseas asumir ese riesgo?
Resultado: decides no saltar = no compras mi servicio. Mi copy es correcto pero no te seduce ni convence.
- En el mundo paralelo 2: Mi texto lista las características de la experiencia. Después, te pone el caramelo en la boca. Te cuenta el chute de adrenalina que sentirás al saltar al vacío y además menciona lo bien que se lo han pasado otros clientes que han saltado antes que tú. Por no hablar de los beneficios del salto, que sube la autoestima. Tus ganas de lanzarte al vacío son más grandes que tus dudas. Deseas con todas tus fuerzas experimentar qué se siente al saltar al vacío y unirte al grupo de privilegiados que han dejado su testimonio sobre la experiencia.
Resultado: Compras la experiencia, saltas por la ventana exultante de felicidad y caes sobre un mullido colchón. Tus expectativas se han cumplido = recomendarás mi experiencia porque has quedado satisfecho. Mis técnicas de copywriting han apelado a tu mente subconsciente para que comprara y tu mente consciente ha quedado complacida.
- En el mundo paralelo 3: Mi texto consigue disipar tus miedos y te anima a saltar. El copy es tan seductor que incluso consigue que pases por alto una desagradable sorpresa: no hay colchón para amortiguar la caída.
Resultado: Compras mi experiencia, saltas por la ventana exultante de felicidad y terminas en el hospital. Tus expectativas no se han cumplido = nunca más vuelves a comprar en mi web, me pones una denuncia por negligencia y avisas a todos tus amigos, familiares y vecinos para que me hagan mala propaganda siempre que puedan. Mis técnicas de copywriting han apelado a tu mente subconsciente pero después del salto, tu mente consciente se ha dado cuenta del engaño.
Como ves, hay una diferencia sustancial entre vender describiendo el producto, vender seduciendo o vender enamorando al lector con engaños o medias verdades.
- Aquellos que solo describen sus productos/servicios y no usan técnicas persuasivas están echando sus probabilidades de vender a suertes.
- Los que usan textos persuasivos, con productos o servicios de calidad, consiguen más conversiones y clientes satisfechos.
- Pero los charlatanes que enamoran con textos y mentiras lo único que consiguen es cavar su propia tumba.
El peligro no es el arma que se usa para vender, sino quién la empuña.
Espero que este ejemplo humorístico resuelva la pregunta de si el copywriting engaña.
¿Cuándo hay que empezar a usar el copywriting en un negocio digital?
Si tienes una página web o ecommerce ya estás tardando. Sé que soy muy pesada, pero voy a repetir lo mismo mil veces, hasta que me quede con la boca seca, o los dedos sin huella dactilar de tanto teclear:
Los textos de un negocio digital son el comercial que está al servicio del cliente. O dicho de otra manera, nuestra arma secreta para seducir al que queremos que sea nuestro cliente.
Grábatelo a fuego.
Yo empecé a usar el poder de las palabras por intuición y tardé años en ponerle nombre. Se llama copywriting y ojalá hubiera sabido que existía mucho antes, para usarlo en toda su extensión .
Sí, conseguí seducir a mis clientes con las descripciones de los murales. Pero ahora que me dedico profesionalmente a la redacción de textos persuasivos, y he comprobado el potencial que tienen, me doy cuenta de la cantidad de patinadas que hice en mi negocio; y la de oportunidades de venta que perdí por no saber aplicar técnicas de copy.
Tú aún estás a tiempo de aplicarlas. No hagas como hice yo. Descubre si los textos de tu negocio «patinan».
Por cierto, te invito a echar un vistazo a mis recursos gratuitos de copy (ojalá yo los hubiera tenido cuando empecé mi primer negocio online)
Comunica, seduce y copywriting