Errores en internet
Todos los que tenemos negocio soñamos con trabajar menos y ganar más, aunque suele quedarse en eso, en un sueño.
Tener un negocio no es sinónimo de saber llevarlo y, sin una buena gestión, acabas trabajando un montón de horas y ganando cuatro duros.
Te lo digo por experiencia.
Con mi primer negocio online trabajé más horas de las que tiene un reloj, gané mucho dinero y al final me arruiné.
Podría echarle la culpa a la crisis (empecé en 2006 y me pilló de lleno) o a la competencia desleal (que la hubo, por parte de los distribuidores del producto que vendía), pero la responsabilidad (que no culpa) de que todo fuera de mal en peor fue toda mía.
No sabía lo suficiente. Punto.
Y no tenía ni idea de la idiosincrasia del mundo de internet.
La cagué en muchísimas cosas, acerté en otras (por chiripa o por sentido común) y aprendí más de lo que podrían haberme enseñado libros, cursos o títulos universitarios.
9 de cada 10 dueños de negocio no saben qué se llevan entre manos; al menos los que están en el mundo digital o intentan pasar a él (estadística casera basada en mi veteranía)
En general los negocios offline se gestionan fatal, pero en el caso de los negocios digitales el nivel decae hasta límites insospechados.
Preocupante.
Básicamente porque, y esto es una opinión personal, aunque creo que no voy equivocada, en pocos años los negocios offline que no hayan dado el salto al mundo de internet morirán.
Las páginas web han dejado de ser un capricho o una tarjeta de visita por aquello de «si me buscan (en internet) que me encuentren». ¿Quién te va a encontrar si no sabes cómo tener visibilidad? ¿Los que ya te conocen? Esos no te interesan.
Quien está por estar, en internet, pierde el tiempo.
Podría empezar hablándote de los servicios de copywriting, pero no lo haré; ya lo hice en mi artículo anterior «Los servicios de copywriting son una estafa (palabra de copy)» (no te dejes engañar por las apariencias) 😉
Lo que haré es desgranar los errores más básicos que se comenten en mundo online; algunos de los que cometí yo hace años y que, por desgracia, repiten la mayoría de dueños de negocio a los que tengo el placer de ayudar.
¿Quieres seguir con tu negocio dentro de 5 años?
Pues ponte las pilas, ya.
¿Necesitas pasar tu negocio offline a digital?
Si no transformas tu negocio de offline a online, en pocos años (menos de los que piensas), estarás asistiendo a su funeral.
D.E.P.
Aunque haga tiempo que tienes un negocio offline que funciona lo que te contaré es tan fuerte que te hará llorar más que si pelaras 100Kg de cebolla mientras masticas guindillas.
Sorry. Soy de la opinión que los baños de realidad deben darse cuanto antes mejor; así uno ya está listo para lo que le echen.
Agarra un paquete de pañuelos de papel y sígueme.
Error en internet #1 Querer vender a todo el mundo
Pregunta: ¿A quién le vendes tu servicio?
Respuesta: Mi servicio es para todo el mundo.
Meeec.
Respuesta incorrecta.
La he escuchado tantas veces de labios de mis clientes que ya he perdido la cuenta.
Que tu producto/servicio sea para todo el mundo no significa que todo el mundo sea para tu producto/servicio
Es un error habitual. Querer vender los productos o servicios a todo lo que se mueve.
Lo triste es que a casi ningún emprendedor le huelen mal. Y mira que debería apestar.
NO apuntar a un solo cliente es una de las mega súper cagadas que mata los negocios en general y los digitales en particular; una muerte larga, lenta y dolorosa.
Si no tienes idea de a quién te diriges, ¿cómo pretendes persuadir o crear anuncios que conviertan, o comunicar bien en RRSS? Por no hablar de crear una marca y destacar de tu competencia.
Antes de escribir cualquier texto, primero debes definir a quién quieres persuadir con tus palabras.
¿No sabes cómo hacerlo? Contrata a un profesional para que te ayude. Te aseguro que es dinero bien invertido.
Si pones mal la primera pieza, lo que construyas sobre ella no tendrá más consistencia que un castillo de naipes.
Error en internet #2 Dejarse llevar por el brilli-brilli
El mundo de internet es tentador y encantador (de serpientes).
Es como esas cabinas de metacrilato, con un pobre incauto en su interior, que salen en los concursos de la tele.
El presentador le dice al concursante que tiene dos minutos para atrapar todos los billetes que pueda y, a continuación, pone en marcha el ventilador.
Los billetes empiezan a revolotear como mariposas y ¿qué hace el concursante? Se vuelve loco. Ve la oportunidad de ganar dinero y empieza a mover los brazos intentando atrapar billetes.
Pero los billetes voladores no son tan fáciles de atrapar como parece. Cuando cree que tiene uno, abre la mano para atrapar otro y pierde el que ya tenía.
¿Cómo termina el asunto? Con el concursante agotado de tanto mover los brazos y, lo peor, con muy poco dinero.
En internet hay mil oportunidades de negocio, pero debes centrarte en una.
Picotear de todas partes te deja exhausto y sin dinero en el bolsillo; como el concursante.
Yo cometí ese error. Pequé de falta de foco y de estrategia. O de ambas.
Lo que más me duele es que algunos de mis clientes están pasando por lo mismo.
Te lo ilustraré con una conversación inventada, aunque basada en hechos reales.
Cliente: Me han dicho que Instagram lo está petando.
Yo: ¿Sabes si tu cliente está en Instagram?
Cliente: Ay, pues supongo. Todo el mundo está en Instagram, ¿no?
Yo: Bueno, pero todavía no tienes ni el copy de la web, ni sabes cuál es tu mensaje.
Cliente: Ya, pero es que ahora mismo lo que me interesa es conseguir más clientes, no solo en la web, también en RRSS.
Yo: Ok. ¿Y qué pasa con el plan de comunicación? ¿Tu mensaje de marca? ¿El copy?
Cliente: Eso ya lo haré. No creo que sea incompatible con captar clientes en RRSS, ¿verdad?
Inspiro y me armo de paciencia.
Yo: Es complicado captar clientes sin un mensaje pero… suponiendo que lo consigas, ¿dónde los meterás?
Cliente: ¿Eing?
Yo: Que si tienes un embudo de ventas.
Cliente: ¿Embudo? ¿De ventas?
Que no.
Que no puedes dejarte llevar por el brilli-brilli, apostar por el «me han dicho que esto vende» o intentar emular a tu vecino con el absurdo razonamiento de «si a él le ha funcionado, a mí también me funcionará».
¿Qué es lo primero que tienes que hacer si quieres que tu negocio offline funcione online?
Definir qué quieres, para quién lo quieres y cómo lo quieres.
Te garantizo que en internet hay muchos pollos sin cabeza entrando en cajas de metacrilato con la esperanza de conseguir dinero.
¿Quieres ser uno de ellos?
Error en internet #3 Creer en los cuentos con final feliz (o no tan feliz)
Seríamos capaces de amputarnos los dedos del pie para meterlo en un zapatito de cristal y que el Príncipe Azul (aka cliente) nos diera el «Sí, quiero».
¿Quieres que tu cliente se case contigo, con tu marca, y al mismo tiempo conservar los dedos del pie?
Pues lo tienes chupado. Aclara los 3 puntos básicos de tu negocio; antes de pensar en logos, diseño y otras florituras.
- Qué vendes
- A quién se lo vendes
- Y por qué es mejor que te lo compren a ti
Ojo, no le metas rollo al Príncipe Azul. Del tipo «qué guapo soy», «qué bien que lo hago todo», «mis servicios son tu solución» para acabar rematándolo con un «¿Quieres casarte conmigo?»
La saturación de mensajes clonados produce ceguera y sordera en los Príncipes Azules
Yo, cuando entro en una página web y veo una sección que dice «nuestra misión» o «nuestros valores» siempre pienso ¿Y a mí qué me importa?
No es que sea borde. Es que es así.
A nadie le importa. Ni mi visión, ni mis valores. Ni tu misión, ni tu valores.
No digo que no debas transmitir los valores y la misión de tu empresa. Lo que digo es que lo hagas con gracia, utilizando el copywriting. No pintando un mensaje cualquiera sobre una camiseta corporativa y diciendo al cliente que se la lleve puesta (metafóricamente hablando, claro).
Perdemos de vista que la clave para vender es saber comunicar.
El mensaje de marca es el alma de tu negocio .
Los textos del producto o servicio su cuerpo.
Y el diseño de la página web el vestido.
¿Qué error cometen los dueños de negocio offline al pasar a internet? Empezar por el final.
Primero buscan a un diseñador para que les haga un logo bonito y una página web preciosa.
Maaal.
Después adaptan los textos, muchas veces hechos con prisas, a la página web (sin tener en cuenta ni el objetivo, ni la estructura, ni las llamadas a la acción…).
Fataaal.
Y por último, cuando el negocio no arranca, o va cuesta abajo y sin frenos, acuden a un profesional del copywriting a ver si, arreglando un poquito los textos, detienen el desastre.
Como decía mi abuela: milagros, a Lourdes.
¿Te imaginas metiendo tu alma en un cuerpo ajeno? ¿O modificando tu cuerpo para adaptarlo a la ropa o al calzado?
Pues en los negocios que veo por internet, se hace.
Si deseas que tu negocio sobreviva al mundo online, dale alma, dótalo de cuerpo (lo más seductor posible) y cómprale las mejores galas,
O dicho de otro modo:
- Primero el mensaje (de marca)
- Segundo los textos persuasivos (para vender)
- Tercero el diseño (entregado en cuerpo y alma) 😉
Error en internet #4 Auto convencerte de que tu negocio NO es digital
Imagina que tienes un negocio offline, las ventas están flojas, no sabes qué hacer para atraer clientes (de la forma tradicional) y decides que la solución está en internet.
Creas una página web (o le das un lavado de cara a la que ya tienes), pones dinero en anuncios de Google Ads o de Facebook Ads y abres algunas cuentas en RRSS para dar bombo a tus servicios.
Como no ves resultados, te pones en contacto conmigo, me cuentas la situación y te digo que el fallo es que no sabes cómo llevar tu negocio digital.
Tú: Nooo, si mi negocio no es digital. Es offline.
Claro…
Ahora imagina que yo tengo un negocio digital, veo que las ventas están flojas y decido abrir un local a pie de calle con la esperanza de vender más servicios.
Al cabo de unos días nos encontramos y te cuento mi nueva aventura empresarial. Me felicitas y me dices «Bienvenida al club de los negocios offline».
¿La respuesta?
Yo: Nooo, si yo no tengo un negocio offline. Mi negocio es digital.
Oye, si estás en internet, tienes un negocio digital. Y si tienes un negocio digital, debes saber cómo hacerlo funcionar; de lo contrario estás perdiendo tiempo, energía y dinero.
¿No sabes por dónde empezar?
Empieza por el principio.
Repito: mensaje, textos y web.
Si falta alguna de estas 3 piezas del engranaje, o es defectuosa, el mecanismo de ventas de tu negocio falla.
Palabrita. Que antes de cura fui monaguillo (muy eclesiástico me está saliendo el post, ¿no?) 😛
Error en internet #5 Invertir nada, poco o donde no toca
Todo el mundo tiene claro que en un negocio offline es necesario invertir dinero para que funcione. Cambiar bombillas, instalar un toldo, comprar mesas, renovar la sala de espera…
En cambio en un negocio online muchos esperan que de frutos sin destinar ni un euro (o la divisa que sea). Supongo que por aquello de que, al ser virtual, la inversión también debe serlo.
Nada más lejos de la realidad.
Si tienes un negocio digital debes invertir en él. Bastante. En copywriting, en diseño gráfico, en SEO, en contenido para el blog, en email marketing, etc.
La verdad es que cuando hablo con clientes y les explico todo lo que tienen que hacer (a parte del copy puro y duro) para que su negocio funcione, se asustan.
No deberían. Si las cosas se hacen bien, sin dejarse llevar por el brilli-brilli, la inversión se recupera con creces.
¿Cuál es el problema? Que no se prioriza correctamente y se dedican recursos a tácticas que, al no ser parte de una estrategia digital, no aportan nada.
Por ejemplo, el mensaje de marca y el copywriting, que debería ser la primera inversión, es el último mono con el que se cuenta.
¿Qué «monos» se priorizan?
«El mono» de la publicidad. Invertir en anuncios es primordial.
¿Lo es?
Bueno, si no se aplica copy al texto del anuncio, si la página de aterrizaje brilla por su ausencia, si no existe un embudo de ventas… Es como hacer un brindis al sol.
Sin un plan y sin un mensaje claro quizás se atrae algún que otro cliente, pero es pan para hoy y hambre para mañana.
«El mono» del SEO o posicionamiento orgánico (para neófitos: cuando las páginas de tu web aparecen en las primeras posiciones de Google sin pagar), considerado el oráculo de los negocios digitales.
Obviamente, aparecer en las primeras posiciones de Google tiene gran valor. Aunque… ¿quieres que te cuente un secreto? No vale solo con posicionar.
El objetivo del SEO es conseguir que los clientes te encuentren. Pero si primero no trabajas la comunicación de tu negocio es complicado saber qué palabras clave hay que posicionar.
SEO + copywriting es un tema peliagudo que lleva a confusión. Se ha vendido la idea de que hay que aplicar SEO al copy cuando en realidad es al revés (me extenderé más sobre el tema en otro post, con la colaboración de mi SEO de cabecera).
«El mono» del diseño. El eterno rival de los textos. Un mono necesario, siempre y cuando tengas en cuenta que la imagen sin el mensaje es como un beso apasionado sin lengua.
«El mono» de las RRSS. Más que mono, las RRSS las definiría como una manada de monos saltando de un árbol a otro, mareando al personal. Me sorprende que se apueste por ellas sin contar antes con un mensaje claro y un copy estudiado (¡Sacrilegio! Ahora mismo me estoy santiguando).
Vamos a ver, cuando pasas tu negocio offline al mundo digital, en lo último en lo que debes pensar, y poner foco, es en las RRSS.
De qué te sirve estar en todos lados si no te detienes a pensar qué dices, por qué lo dices, cuál es tu objetivo o cuáles son las necesidades de tu cliente potencial.
Además, las RRSS por si solas no traen clientes. Repito. No traen clientes.
Apostar por ellas, sin un plan estratégico, tiene el mismo efecto que salir al patio de vecinos a gritar que les invitas a chocolate con churros sin saber si son celíacos e intolerantes a la lactosa.
Moraleja: Invierte en el mono que toca, cuando toca y cómete los churros con chocolate en la intimidad.
Los errores en internet se pagan caros
Puedes restar importancia a lo que he dicho o esconder la cabeza bajo tierra como un avestruz, pero no por eso dejará de ser cierto que los errores en internet se pagan caros.
No por el error en sí mismo, sino por el efecto dominó.
No perfilas bien a tu cliente ideal
⬇️
Los los textos de la web y los artículos del blog no apelan a tu audiencia objetivo.
⬇️
La web y los artículos de tu blog al no ser de interés para la audiencia hacen que, a pesar del SEO, no obtengas tráfico.
⬇️
La falta de tráfico significa que tienes que invertir más en publicidad.
⬇️
La publicidad no es efectiva porque no va dirigida a tu cliente ideal (que no has definido).
⬇️
La mayoría de los clientes que llegan a tu página con publicidad no son tu cliente ideal y los que sí lo son, no convierten porque el copy de la página no les dice nada.
Y suma y sigue…
Empezar con mal pie significa trabajar más y conseguir menos.
¿Es lo que quieres?
Hazme caso.
No te dejes llevar por el brilli-brilli y empieza tu negocio digital con fundamento.
Invierte en él, en tu futuro y en la tranquilidad de saber que las acciones acertadas te llevarán donde deseas estar, donde te mereces.
¿Quieres transformar su negocio offline sin cometer errores en el mundo online?
Haz clic aquí (link mágico con recursos de copy gratis para tu negocio offline 😉
Ah, y recuerda…
Comunica, Seduce y Copywriting.
2 comentarios en «5 Errores en Internet que arruinan tu negocio offline»
Muy bueno, como de costumbre…. Cuantas cosas elementales tenemos que aprender!
Tienes razón, Santiago.
Nos enredamos con lo más complicado y olvidamos lo más básico; de vez en cuando va bien recordar qué es 😉
¡Saludos!